En primavera de este 2020 hemos dado un nuevo paso hacia la sostenibilidad y la economía circular. Por primera vez, hemos obtenido de campos propios toda la cebada que las vacas de nuestra granja de Santa Pau necesitan durante el periodo de un año. Asimismo, el estiércol de las vacas nos han servido para enriquecer los campos y volverlos a cultivar para obtener maíz.
De la tierra a las vacas
La finca donde tenemos las instalaciones y la granja de las vacas, mas Els Casals, no dispone de suficiente espacio para cultivar toda esta cebada. Por ello, la plantamos en La Coromina, una finca con más de 20 hectáreas de campos, que La Fageda compró en 2017 y que también está en Santa Pau. El pasado otoño cultivamos la cebada en tres cuartas partes del terreno de esta finca. El resto fueron para hierba de prado, que alimenta a las terneras y las vacas que están a punto de parir.
En primavera, ya hemos podido recoger unas 130 balas de hierba y más de 600 toneladas de cebada que, por primera vez, no tendremos que comprar.
De las vacas a la tierra
Recogida la cebada, la hemos aplastado y tapado para que fermente y, en 20 días, esté lista para alimentar a las vacas, combinada con otros ingredientes, como paja, bagazo y maíz.
Precisamente, el maíz es el otro cereal que hemos plantado en La Coromina, una vez enriquecida, con el estiércol de las vacas, la tierra donde estuvo la cebada. Hoy va creciendo hasta que, dentro de unas semanas, lo podamos cosechar y suponga la mayor parte del maíz que necesitamos a lo largo de un año.
Estas actuaciones también han hecho posible que, en mas Els Casals, las vacas dispongan de más espacio para pastar.
En definitiva, un nuevo paso que ha emprendido nuestro proyecto hacia la sostenibilidad y la autosuficiencia, entre otros que tenemos previsto en el marco de la economía circular.